El peluche, un muñeco, incluso un pañuelo o una almohada son algunos de los objetos a los que el bebé se puede aferrar, sobre todo a partir de los seis meses. Es importante respetar la dependencia que el bebé crea con este objeto porque le da seguridad, ayudándole a afrontar situaciones nuevas en las que se tiene que separar de los papás. Además, existen otros momentos en que los llamados “objetos afectivos o de transición” calman y rebajan la tensión del bebé.
Beneficios de contar con un “amigo inseparable” para el bebé.
A partir de los dos años, este objeto asume una nueva función, ayudándole a reforzar su personalidad y a independizarse más de sus papás. Sin que su dependencia denote ninguna carencia afectiva ni falta de seguridad hasta los tres años, conviene que, a partir de esta edad, se limite su uso si vemos que el niño vive demasiado enganchado a este objeto; de este modo, estaremos ayudándole a iniciar una nueva etapa de autonomía. Sin que se note, le diremos, por ejemplo, que no lo podemos llevar al parque, porque se podría manchar o porque no podría tirarse por el tobogán.
¿Cómo le enseñamos a nuestro hijo a ser responsable? Enseñarle a nuestro hijo a ser…
Señales para detectar el bullying escolar El bullying escolar consiste en maltratar, humillar y agredir…
Cuidados previos al embarazo Antes de comenzar con la búsqueda de un bebé, existen varios…
¿En qué consiste el parto respetado? El parto humanizado o respetado valora el protagonismo de…
20 Consejos para padres primerizos Si tuviéramos que enumerar los consejos prácticos para padres primerizos,…
Cómo manejar los caprichos en los niños Los berrinches y caprichos corresponden a una etapa normal del…
Esta web usa cookies.