Maneras de ayudar a nuestros hijos a superar la timidez

A la mayoría de las personas les asustan las situaciones nuevas y las personas desconocidas. Sin embargo, una de las mejores extrategias ayudar a nuestro hijo a superar la timidez es invitarlo a vivir intensamente, no hay nada que perder. Si nuestro hijo es tímido, lo peor que podemos hacer como papás es forzarlo a que lleve a cabo actividades. Lo indicado es motivarlos, incentivarlo a que pruebe y que lo intente y, por sobre todas las cosas, recalcarle cada tanto que nada tiene de malo el equivocarse, que esa es una forma de aprender en la vida. Sin errores, sin equivocaciones, no existe aprendizaje alguno.

Respecto a la motivación, es bueno que ésta sea moderada proque lo importante es que el niño o niña se mueva su propio ritmo. Hay que darle el tiempo que necesita para adaptarse a las situaciones nuevas. No hay que olvidarse de que siempre la actitud de los papás es crucial para ir superando la timidez ya que nuestra influencia en enorme. Es en esos pequeños detalles en los que podemos darle un gran impulso para que venza la timidez. Por ejemplo, podemos dejar que tome nuestra mano cuando se sienta nervioso o ansioso. Esto le brindará contención y seguridad.

Hay que buscar no sobreprotegerlo ni mimarlo sino buscar de incentivarlos para que experimente grados moderados de retos. Siempre debemos respetar su temperamento y personalidad con sumo afecto y cariño porque es justamente esto lo que le hará sentirse más confiado y evitará que pueda sentirse criticado o señalado. Además, e simportante no etiquetarlo de “tímido” delante de otras personas, ya sean amigos o compañeros. Las etiquetas pueden dejar una marca imborrable de por vida, incluso hasta cuando lleguen a ser adultos.

Otros consejos incluyen:

• Evitar las burlas : hay que tratar a los hijos con cariños y dulzura y esto sólo traerá resultados sumamente positivos.}
• Intentar averiguar las razones o motivos de su timidez: si le teme a algo, si le preocupa alguna situación y, de esta manera tratar de conversar al respecto de forma natural.
• Siempre ser ejemplo: como papás debemos mostrarnos sociables, sonreir al saludar, conversar con diversas personas, fomentar actividades recreativas, salir de la casa.
• Elogiarlo: si se anima a saludar otro niño, a jugar con él o simplementea saludar a alguien por primera vez, es bueno elogiarlo. Por más tonto que suene, esto le servirá de incentivo para repetir la experiencia.
• Charlar con sus maestros/as:  esto a veces es de mucha ayuda. Ellos pueden ser un aliado importante para que comprendan el problema pero no para que lo sobreprotejan.

Algunos rasgos de la timidez

En artículos de psicología se suelen señalar ciertos rasgos de la timidez. Entre ellos,se destaca que el niño tenga problemas para relacionarse con sus iguales o con los adultos. No participa ni pregunta en clase, le cuesta iniciar conversaciones con otros niños o tomar la iniciativa en cualquier actividad. Además, se muestra reservado y distante. Pueden también estar presentes una pasividad excesiva, aislamiento, baja asertividad, escasa capacidad de expresión emocional y de comunicación, inseguridad, lentitud y sumisión al grupo. En definitiva presentan un escaso repertorio en habiliades sociales.

También, pueden estar presentes algunas conductas de ansiedad (anticipatorias de la situación o en la propia situación), temores y miedos irracionales en el sentido de tener que expresar una opinión o efectuar algún acto en presencia de sus iguales o adultos. Acompañando a los temores se produce la activación psicofisiológica (ansiedad) que se manifiesta con temblores, rubor, tartamudeo, dolores estomacales, etc… Lo peor es la falta de autocontrol que puede experimentar el niño ante estos episodios lo que le puede llevar a evitar activamente situaciones concretas.

El niño tímido es un niño que sufre y eso le puede llevar a problemas afectivos, de baja autoestima y una tendencia a subestimarse e incluso a desarrollar ciertos sentimientos de inferioridad acompañados de indefensión y ocasionalmente depresión, justo por eso la mejor alternativa es acompañarlo con dulzura y comprensión.