La revolución hormonal que se produce durante el embarazo es la causante del crecimiento de los pechos que comienzan a prepararse para amamantar. Los pechos se agrandan y se sienten más firmes ya desde la cuarta o sexta semana de embarazo, y durante los dos primeros meses puede que crezcan uno o dos talles. Las venas se hacen más notorias a simple vista debido a que el flujo sanguíneo aumenta por el cambio hormonal, y los pechos se tornan más sensibles.
El crecimiento viene acompañado de molestias tales como picazón y cosquilleo porque la piel está estirándose, y una sensación de pesadez y dolor un poco más fuerte del que se siente antes de la menstruación. Durante esta etapa puede que aparezcan estrías, que son como pequeñas grietas en la piel.
También, cambia el color y la apariencia de los pezones y la zona que los rodea, llamada areola, que se torna más grande, oscura y más rugosa al tacto debido al crecimiento de las glándulas de Montgomery (pequeños puntitos presentes en las aréolas), encargadas de producir una sustancia aceitosa para lubricar y proteger toda la zona de posibles de infecciones.
Durante los últimos meses de embarazo puede pasar que los pechos comiencen a segregar unas gotas de calostro, que es la primera leche y que se presenta como una sustancia amarillenta y viscosa, encargada de nutrir al bebé en sus primeras horas de vida. De todas maneras, hay futuras mamás que no experimentan esto y no significa que no vayan a tener leche cuando nazca su bebé.
No es necesario ningún tipo de preparación específica para la lactancia durante el embarazo porque, gracias a la acción de las hormonas, el pecho materno se va preparando sin necesidad de intervención. Sin embargo, es bueno saber cómo son los propios pezones y pedirle al obstetra o a una puericultora que los revise para evaluar si es necesario hacer alguna maniobra que favorezca la prendida del bebé y la lactancia, ya que hay pezones, como los umbilicados, que pueden necesitarla.
La Fundación Lactancia y Maternidad (Fundalam) recomienda recordar y poner en práctica la sigla ALAS (Aire, Lubricación, Agua y Sol):
¿Cómo le enseñamos a nuestro hijo a ser responsable? Enseñarle a nuestro hijo a ser…
Señales para detectar el bullying escolar El bullying escolar consiste en maltratar, humillar y agredir…
Cuidados previos al embarazo Antes de comenzar con la búsqueda de un bebé, existen varios…
¿En qué consiste el parto respetado? El parto humanizado o respetado valora el protagonismo de…
20 Consejos para padres primerizos Si tuviéramos que enumerar los consejos prácticos para padres primerizos,…
Cómo manejar los caprichos en los niños Los berrinches y caprichos corresponden a una etapa normal del…
Esta web usa cookies.