El cordón umbilical es una especie de tubo que une el ombligo del feto con la placenta de la madre. Está formado por una vena y dos arterias. Pero puede ocurrir que solo se desarrolle una, malformación que se conoce con el nombre de arteria umbilical única.
La vena que contiene el cordón umbilical transporta oxígeno y nutrientes desde la placenta a tu bebé, mientras que las dos arterias devuelven los productos de desecho de tu bebé a la placenta. Después, la placenta transfiere estos desechos a la sangre de la madre, que se encarga de eliminarlos. La arteria umbilical única (SUA, por sus siglas en inglés) se caracteriza por la ausencia de la arteria umbilical izquierda o derecha.
Aunque las estadísticas varían según el lugar donde se haya realizado el estudio, se habla de que un 1% de los embarazos presentan el problema. Además, la incidencia es 3-4 veces mayor en los embarazos múltiples que en los embarazos únicos. Los estudios sugieren muchos factores de riesgo para el SUA: edad avanzada de la madre, la etnia (más frecuente en mujeres blancas), multiparidad y gestación múltiple. También, se asocia a anomalías cromosómicas, sobre todo a la trisomía 18 o Síndrome de Edwards. Hoy se desconoce cuál es la causa de que el cordón del bebé se desarrolle solo con una arteria, por lo que resulta imposible prevenir esta anomalía.
Lo habitual es que se detecte en la ecografía detallada que se realiza alrededor de la semana 20 del embarazo. Pero puede diagnosticarse antes o después de la ecografía de las 20 semanas, ya que el funcionamiento correcto del cordón se comprueba de forma rutinaria en los controles con ultrasonidos. La detección de esta anomalía resulta más fácil aún gracias a la ecografía Doppler, sonogramas que permiten identificar con colores el flujo de la sangre, mostrando si el cordón dispone de las dos arterias o solo de una. Aunque no suele realizarse de rutina, puede recomendarse hacia el final del embarazo, en el último trimestre, para medir y evaluar el flujo de sangre que recibe el bebé a través del cordón umbilical. En caso de arteria umbilical única, la única arteria existente trabaja también por la otra. De hecho, su tamaño es mayor del normal.
Aunque el meta-análisis más reciente, basado en 57 estudios, no encontró una asociación relevante entre esta malformación y otras sin alteraciones cromosómicas, el SUA sí parece implicar con frecuencia ciertas complicaciones obstétricas, como bajo peso al nacer, parto prematuro y baja puntuación en el test de Apgar. Pero también, en algunos casos muy concretos, puede afectar a la salud de los riñones, el aparato digestivo o el corazón del bebé durante el embarazo. Para descartar posible anomalías en estos órganos, el obstetra los vigilará más atentamente, realizando un ecocardiograma del corazón del bebé, o incluso con una amniocentesis.